sábado, 22 de octubre de 2011

Ya nada da igual



Mañana no es un día más. No importa por quien votes o que pienses de cada candidato o proyecto político. No importa si sos alto, bajo, flaco, gordo, negro, blanco o amarillo. Mañana importa tu corazón. Ese que se juega a cultivar nuevos mundos, ese que sueña en mejorar nuestra existencia. El que se llena de jarabe rebelde ante cada injusticia.

¡Mañana importas vos pibe!, ¡mañana importas vos piba¡. No importa lo que te quieran imponer. Importa tu historia, tu lucha y tus pasiones. Claro que lo tuyo no se construye en el aire, claro que vos sos tus compañeros y que la lucha es colectiva. Claro que te duele el pecho con cada injusticia y a la vez se te carga el puño para erradicarlas. El puño hecho virtud, el puño emancipador que nada tiene que ver con el puño violento de los cobardes.

Mañana importa tu familia, importa tu barrio, tu club, tu pueblo. ¡Mañana importa el futuro cabeza¡. Vos sabes, no es sólo poner un sobre con un candidato. Es mucho más: es desafíos, es interpelar y controlar. Es pelear, movilizar y criticar. ¡Y sí pibe(a)¡ la democracia es participación, no cada 2 o 4 años, sino cada día de tu vida. ¡Despertáte chabón(a)¡, hay un mundo nuevo por conocer y construir. Decí lo que pensas, crítica, busca, ama. Necesitamos escucharnos, que cada voz sea grito, que nada sepamos de silencios y silenciados.

Mañana pibe(a) vamos a votar, ¡no te hagas el gil¡. Vos sabes que costo mucha sangre esto. No importa a quien elijas. Importa que hables, importa que con tu voto, el mío y el de otros, reventemos las urnas. Y si pibe(a), ya nada da igual.


El infernal

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