viernes, 22 de octubre de 2010

Panorama

"...en algo andaría, no me va a decir. Se matan entre ellos, vio. Dime con quién andas, decía mi viejo. Las protestas son así de peligrosas. Pobre pibe, después de todo tenía veintitrés años; no sabía lo que hacía. A esa edad uno cree que no le puede pasar nada, me entiende. Pero en algo andaría, como aquellos. Piensan que pueden cambiar las cosas y esto ya está podrido. Pero podrido podrido, eh. No, acá ya no hay nada que hacerle. Hay que quedarse en la casa y listo. Salir a hacer unos mangos y meterse adentro otra vez. ¿Hasta dónde me dijo, señora? Y de los mineros, qué me dice. Es de no creer, eh. Hasta Tinelli habló de eso. Pero ahora ya está, con lo de este pibito ya se olvidó lo otro. Vio que pasa eso acá, todos locos con un tema y al rato se tapa con otro y así. Yo tengo la radio por la música, me entiende. A veces escucho al Baby, pero muy de vez en cuando. Que se yo, uno se distrae, vio. Anuncian lindo para el sábado y el domingo. Habrá que salir a tomar unos mates por ahí. Aunque nunca se sabe, hoy ya ni se puede salir. Porque uno no los ve, pero esos andan por todos lados, eh. Lo que pasa es que uno no le presta atención. Si no se vuelve loco uno, ¿o no?. ¡Qué ispa este! Ve, ve lo que le digo. Mirelós, ahí en la esquina. No quieren laburar, no quieren. Si el trabajo está acá, ellos van para el otro lado. Ganan en lanzamiento de pala, decía mi viejo. Yo no sé cómo era el pibe este, pero estaba cortando una vía. Qué tenía que hacer ahí. Veintitrés años, me entiende. Y la policía que se ha mandado una macana. Pero qué quiere que le diga, si yo fuera milico no sé qué hago, eh. Debe ser difícil. Doblo antes de Callao, señora, porque está cortado. Estos se piensan que uno anda paseando. Todos los días cortan por algo. Si yo fuera policía... un día, eh. Un día que me den y yo los curo a todos. Pero vio que ahora vinieron con esto de los derechos humanos y qué se yo. No sé cómo van a hacer con lo de este pibe. Encima era del Partido Obrero, claro. Qué quiere que le diga. Se matan entre ellos. Y los políticos saben lo que pasa, no me va a decir. Ahora salen todos. A río revuelto, decía mi viejo. Que se yo, uno ya vivió demasiado y vio tantas cosas. Ahora van a salir todos lo años con las banderas esas. Como con los dos pibes esos, los del 2002. También, no sé que hacían ahí. Lo habían metido al cabezón en esa, se acuerda. Y qué quiere, con el quilombo que era este país. Qué se podía hacer. Pero lo del pibe es otra cosa. Nada que ver. Se matan entre ellos. ¿Y usted que me dice, señora? Ah, llegamos. Bueno, muy bien. Catorce sería. Lo que sí, le voy a deber un pesito. No hay monedas por ningún lado, vio. Una cosa de locos. No sé dónde vamos a ir a parar. Cierremé despacio, ahí va. Buen fin de semana, doña."



Rolando Rivas.

2 comentarios:

  1. Genial. Me encanto!

    Bien taxista. Igual me quedé pensando, que muchos tenemos pequeños Rolandos Rivas dentro. Que si, que están todos juntos en los tacheros, eso no cabe duda.

    Pero el que nunca haya pensado nada de todo esto, al menos por descuido.... es complicado salirse de una pedagogía opresora como la nuestra.
    Aunque cada tanto.. hay destellos. Yo creo y me aferro a ellos.

    Salú!

    ResponderEliminar
  2. Sería como captar el sentido común.
    Muy bueno, tristemente acertado.

    maju

    ResponderEliminar