lunes, 21 de diciembre de 2009

Consideraciones sobre el comentario del articulo "La secularización de los medios de comunicación"

Continuando con la necesidad de profundizar y "enriquecer" el debate, quisiera en este comentario poner en cuestión algunos de los postulados del comentario anterior. Para lo cual opte por discutir los conceptos indicados en el mismo orden en el que fueron expuestos en dicho comentario:

1) Surgen algunas preguntas inevitables después de la primer defensa que me gustaría que discutamos, a saber:
Cabe la pregunta de ¿hasta cuando, o cuantos años mas de vida en democracia debíamos esperar para terminar con la "ley de la dictadura" de los medios de comunicación? por otra parte, ¿Verdaderamente podemos enmarcar esta disputa en tanto "amigo-enemigo"?, ¿no suena ridículo enmarcar esta necesidad de nueva legislación sólo en un enfrentamiento "gobierno-grupo clarín? ¿No estaremos confundiendo así, "gobierno y Estado" como se ruega no hacerlo en líneas posteriores? ¿Y qué de los que trabajaron 25 años para la regulación de los medios de servicios audiovisuales? Aún así, ¿Alguien afirma que esta es la legislación ideal? ¿Alguien alegó que ella no es perfectible? ¿Cómo desconocer la necesidad de democratizar la información?
Creo que el poder que tienen los dueños de los medios de comunicación y representantes de los grupos mas concentrados de la economía se ve representado en la práctica constante de "creación de sentido" y de interpretación de los hechos"[1] motivo por el cual antes de preguntarse sobre los "efectos colaterales prejudiciales para la sociedad" que la nueva legislación de servicios de comunicación audiovisuales potencialmente puede producir, habría que discutir cuanto influyen hoy estos grupos en la creación de estos tan temidos y abstractos "efectos colaterales" que someten a la sociedad hasta niveles insospechados.

(2) El segundo punto de la defensa cae en la "critica por la critica" que se procura evitar, es decir, presentar que las decisiones se toman en la mesa chica como si esto fuera una novedad en la historia nacional implica hacer abstracción del carnaval de los 90´, década en la cual se remató al país desde estas mesas chicas, en las cuales se sentaban los mismos grupos económicos que hoy claman por la "seguridad jurídica", limitando la posibilidad de que el Estado intervenga, en un claro ejemplo de la contradicción de los noventa:"mercado vrs Estado", que el estallido de 2001 demostró saldada pero que los grupos concentrados vuelven a poner en tapete.
Por otra parte, afirmar que el gobierno "parecería dar los planes sociales a los movimientos que responden a él" sin dar precisiones de esto y hacer abstracción de la "asignación universal por hijo" implica un recorte conciente de la situación actual y una denuncia por la denuncia misma. Ahora bien, tampoco podemos dejar de desconocer que el clientelismo existe y es quizás uno de nuestros peores males, pero ojo con caer en esos lugares comunes de los comentarios de la "tía Tota".
Sin ánimo de defender al Jefe de Gabinete basta con observar efectivamente que es lo que sucedió:
-Sobre el mismo caso - la resolución de desalojar la sede del gremio de aeronavegantes, que la policía no llevó a cabo por mandato del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández- había dos fallos contradictorios, uno que daba la orden de que la lista celeste comande el gremio y otro fallo que sentenciaba que lo tenia que hacer la lista verde, motivo por el cual es necesario no proceder con el desalojo por una clara tensión legislativa. Cayendo de esta manera el alegato por el caso concreto presentado en el comentario anterior.
Por otra parte, se ve claramente una demonización de los sectores piqueteros "aliados" al gobierno, otra vez cayendo en la crítica vacía y suspicaz que nada revela.

3) Por último quería agregar una consideración de cara al comentario que sigue: "es preferible vivir junto a una libertad donde los medios sean “peligrosos” y no en la mansedumbre de los medios al estilo “Chávez”".
Yo no quiero vivir en la libertad donde los medios de comunicación que representan sólo sus intereses particulares impongan sus verdades de espaldas a la sociedad y definidas todas ellas en las temidas "mesas chicas".
Por otro lado, el alegato de la "mansedumbre de los medios al estilo Chavéz" marca un preocupante desconocimiento de la situación venezolana y un claro ejemplo de la crítica vacía de contenido, basta observar lo sucedido en 2002, en dónde los grandes medios de comunicación en conjunto con algunos sectores de "las armas" practicaron un golpe de Estado que devino fallido por la resistencia popular[2]. Quizás vale la pena recomendar un articulo de Miguel Mazzeo "La Revolución Bolivariana y el poder Popular"[3] en el cual afirma textualmente: "Aquí hay que tener en cuenta que en Venezuela los grandes medios de comunicación (que Chavéz no clausuró, ni estatizó) son descarada y monolíticamente reaccionarios. Un poco más que en otros sitios. Por lo tanto su papel fue clave en el golpe de abril de 2002. La reacción popular que devolvió a Chavéz al gobierno se organizó a partir de los medios alternativos y las formas de comunicación y generación de símbolos mas primordiales... en tanto rebelión contra los grandes medios"[4].
A partir de todo esto solo resta decir que debemos tener cuidado con los comentarios que hacemos, y sobre todo, debemos considerar a quien le hacemos el juego a la hora de esgrimirlos, digo mas que nada para evitar que la historia se repita nuevamente como tragedia por estas tierras.

Por Ignacio.



[1] Nietzsche: "No hay hechos, hay interpretaciones de los Hechos".
[2] Basta observar el documental "Puente llaguno" para observar el nivel de participación de los medios de comunicación en el golpe, en una clara manipulación de los hechos.
[3] En "Venezuela:¿ La revolución por otros medios?" Ed. Dialektik. 2006.
[4] Miguel Mazzeo "La Revolución Bolivariana y el poder Popular".p.57.

1 comentario:

  1. Ignacio excelente artículo. Me "primereaste" con la respuesta.
    Te felicito.

    ResponderEliminar